Claves para entender la conformación de una misión de paz de la ONU.
Ariel Henry primer ministro de Haití, solicitó ayuda a la comunidad internacional, para combatir las bandas y liberar las carreteras del país, imprecindible para que fluya el suministro de insumos necesarios.
En ese orden, el ministro de ralaciones exteriores de R.D. Roberto Alvarez, realizó un periplo por varias organizaciones internacionales, aclamando por la esperada ayuda para Haití.
En tal sentido, Vinicio Castillo Semán declara a la prensa que “la ONU no quiere intervenir en Haití, no asume su responsabilidad para que República Dominicana se haga cargo de la situación”.
Para el académico Iván Gaton “China y Rusia impiden que se apruebe una misión de la ONU para intervenir Haití, como estrategia, para complicar la situación en el vecindario de EE.UU. por causa del conflicto geopolítico entre potencias”.
Dos respuestas sobre un mismo tema por dos personas importantes y de crédito en la opinión publica. El primero distinguido abogado, político y exlegislador. El segundo diplomático de carrera y prestigioso académico.
Ante esta duplicidad de opiniones describimos el rol de la ONU y el proceso jurídico internacional para la conformación de misiones de paz de las Naciones Unidas y valorar la verdadera razón por la que no se envían fuerzas de paz a Haití hasta este momento.
La conformación de la fuerza de paz de la ONU.
El Consejo de Seguridad es el responsable de decidir sobre la conformación de una operación de paz de las Naciones Unidas.
Siempre que las condiciones de seguridad lo permitan, la Secretaría General envía una misión de evaluación técnica en el país o territorio en que se prevé el despliegue de una operación de mantenimiento de la paz. Según las conclusiones el Secretario General emite un informe al Consejo de Seguridad.
Si el Consejo de Seguridad determina que el despliegue de una operación de mantenimiento de la paz es la mejor opción, la autoriza mediante una resolución.
¿Quién aporta el personal y equipos de mantenimiento de la paz?
Las Naciones Unidas no tienen un ejército, ni una fuerza policial propia, por lo que se solicita a los Estados Miembros que aporten el personal militar y policial para cada operación. El personal civil de las operaciones de mantenimiento de la paz está integrado por funcionarios públicos internacionales reclutados por la Secretaría de las Naciones Unidas.
Financiamiento de las misiones de paz.
Si bien la decisión sobre el establecimiento, mantenimiento o ampliación de una operación es facultad del Consejo de Seguridad, la financiación de las operaciones de mantenimiento de la paz de las ONU es responsabilidad colectiva de todos los Estados Miembros de la organización.
Las aportaciones de la Asamblea General a los gastos de las operaciones de paz se basan en una escala especial de cuotas que se establece mediante aportes por los propios Estados Miembros. Esta fórmula tiene en cuenta, entre otras cosas, la riqueza económica de los Estados Miembros; a los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad se les obliga a pagar un porcentaje mayor debido a su especial responsabilidad en el mantenimiento de la paz y la seguridad internacionales.
El presupuesto aprobado para las operaciones de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas para el año comprendido entre el 1 de julio de 2021 y el 30 de junio de 2022 es de 6,038 millones de dólares.
¿Cómo se retribuye al personal de paz?
Las Naciones Unidas no tienen fuerzas militares propias. Son los Estados Miembros los que proporcionan, de forma voluntaria, el personal militar y policial para cada operación de mantenimiento de la paz.
Los propios Gobiernos pagan a sus soldados de mantenimiento de la paz, de acuerdo a su rango y su escala de sueldos a nivel nacional. Las Naciones Unidas reembolsan a los países que aportan personal de forma voluntaria a las operaciones de mantenimiento de la paz con una tarifa única, aprobada por la Asamblea General, de 1428 dólares por soldado al mes.
La policía y el personal civil reciben un pago basado en el presupuesto establecido para la operación. Las Naciones Unidas también remunera a los Estados Miembros que proporcionan equipo, personal y servicios de apoyo a los contingentes militares o policiales.
Conclusiones
Por tanto, las misiones de paz deben pasar por el proceso interno de la ONU para tener legitimidad, sin embargo, son los miembros del consejo de seguridad que determinan la realización o no de una misión.
Necesariamente requiere la aprobación vía votación de la mayoría de los miembros del consejo, incluyendo los votos con poder de veto de Rusia, China, Francia, Reino Unido y EE.UU.
En el caso de Haití, la posible misión no ha contado con el favor de China y Rusia, quienes han manifestado que no hay acuerdo dentro de la clase política haitiana sobre el recibimiento de una nueva misión.
En el proceso de la conformación de una mision de paz internacional, las ONU y la Comunidad Internacional no llegan a acuerdo para formalizar la esperada intervención de paz en Haití.
No obstante, en el realismo de las Relaciones Internacionales, Rusia y China no han apoyado él envió de tropas en el Consejo de Seguridad, posiblemente con el interés de complicar la situación geopolítica en el continente, de la misma forma que EE.UU. las dificulta en las regiones de influencia de China y Rusia, especialmente en Ucrania y Taiwán.
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