Por: Juan Cabases
En Siria, los revolucionarios celebran este 15 de marzo el undécimo aniversario del inicio del movimiento de protesta contra Bashar al-Assad, mientras se desarrolla otra guerra en territorio ucraniano. Muchos observadores coinciden en que el origen del ataque del Kremlin en Ucrania se encuentra en territorio sirio.
La impunidad con la que Vladimir Putin habría cometido crímenes de guerra en Siria habría hecho creer a Rusia que podría hacer algo similar en suelo ucraniano. Eso cree Bassam Barabandi, embajador del gobierno sirio en Washington durante 14 años hasta que desertó en 2012.
“Sin consecuencias graves”
“En Siria, la comunidad internacional no actuó más allá de publicar algunas declaraciones y no lanzó sanciones excepto algunas después de tres años de agresión rusa en Siria. Todo esto hizo que Putin sintiera que tenía las manos libres para hacer lo que quisiera sin mayores consecuencias”, estima.
Según Barabandi, Rusia ha demostrado en Siria que no negocia para encontrar un punto de encuentro, y que solo acepta la rendición del enemigo a nivel militar. El diplomático afirma que el caso sirio da pistas poco halagüeñas de lo que se puede esperar en Ucrania en las próximas semanas.
“Necesitan el territorio, pero no necesitan la población. Cuando hay una población en el territorio, como potencia ocupante tienes que proporcionar servicios básicos a la población. Lo mismo sucede en Ucrania. Destrozan el nervio de cualquier ciudad, su sector de la salud, sus mercados, el sistema eléctrico. Es una forma de decir ‘no te necesito’. Matar es una herramienta para hacerles entender que no los quieres en la zona y que cuanto más vacía esté, mejor», dice.
Campo de pruebas militar
La guerra de Siria ha sido un campo de pruebas militar donde Rusia ha utilizado más de 200 armas nuevas que ahora podría desplegar en Ucrania. Parte de este armamento ha sido manejado por el Grupo Wagner, un ejército de mercenarios a sueldo de Rusia. La milicia lleva años combatiendo en Siria y hoy también se encontraría defendiendo los intereses rusos en la ocupación de Ucrania.
La organización civil rusa Memorial, cuyo cierre ordenó la justicia rusa a finales del año pasado, denuncia en RFI los crímenes del grupo Wagner, pese al difícil momento que atraviesa bajo la represión del Kremlin a las manifestaciones antibélicas en Rusia: » Muchas veces cuando tratamos los crímenes cometidos por los combatientes del Grupo Wagner, conocemos el caso del asesinato de un civil sirio en Siria, en 2017, que fue decapitado tras prenderle fuego”, explica el líder del grupo, Alexander Cherkasov.
Cherkasov afirma que, han denunciado este y otros crímenes del grupo Wagner, pero lamenta la justicia rusa no haya encontrado pruebas a pesar de los vídeos que documentan la agresión. “La impunidad sistémica suele acompañar a los crímenes de guerra y los crímenes de lesa humanidad. Por eso hay que estar muy atentos a la actividad que pueda tener el grupo Wagner en Ucrania”, sostiene.
Extraido de RFI
Hi there friends, how is the whole thing, and
what you would like to say concerning this post, in my view its truly remarkable in favor
of me.