¿Qué es SWIFT? ¿Y cómo Rusia fue expulsado de la banca internacional?

Por: Carlos Rodrigo Andia

En el último día de febrero de 2022, en consideración de la reciente intervención militar rusa en territorio ucraniano; EEUU, Reino Unido y Canadá han acordado sancionar a un selecto grupo de bancos rusos removiéndolos del sistema de banca SWIFT. 

¿Pero qué es Swift? ¿Y por qué esta es una decisión tan trascendente? Pero aún más importante: ¿Es esta una medida disuasoria efectiva? 

En los siguientes párrafos nos propondremos a responder estas preguntas.

LA COMUNICACIÓN ES LA REVOLUCIÓN

“Swift es la manera en la que el mundo mueve valor” así se define SWIFT a sí mismo y objetiva y figurativamente están en lo cierto. Swift es la plataforma que usan las bancas y otras entidades financieras para enviar mensajes e información de un punto a otro.

Por sus siglas en inglés, la Sociedad para el Intercambio Financiero Mundial, fue la responsable de más de la mitad de las transacciones financieras a nivel mundial en 2021. Con más de 11000 bancos entre sus miembros, este es el mecanismo dominante para el intercambio de la banca internacional.

Se creó en 1973, cuando 6 de las mayores entidades financieras del mundo desarrollaron un sistema de codificación para la interacción financiera, que permitiera una comunicación rápida, dinámica y segura.

Al día de hoy, SWIFT maneja más de 40 millones de transacciones diarias en su plataforma, moviendo miles de millones de dólares diariamente por todo el mundo; pero lo que en un momento fue lo que se podría entender como un exclusivo Telegram para la banca internacional ha evolucionado más allá de eso. Recientemente, SWIFT ha extendido sus servicios a actividades complementarias como lo son la ciberseguridad, la toma de decisiones basada en datos y el desarrollo de mercados de capitales.

EL GARROTE ECONÓMICO

El reciente anuncio de las previamente mencionadas potencias económicas de castigar a Rusia usando el sistema SWIFT ha sorprendido a muchos, pero esta no es la primera vez que un país es castigado por la comunidad internacional usando esta plataforma. 

A pesar de que SWIFT se define a sí misma como un organismo neutral (facultad que le ayudo a establecerse como el organismo preferido del sistema bancario internacional) sigue estando regulado por la ley belga y, por tanto, debe actuar en cumplimiento del sistema europeo. Fue bajo este mecanismo que en 2012 se logró remover a un grupo de bancos iraníes como medida punitiva en contra de Irán y de su programa nuclear. Si bien este es un precedente importante, la sanción en contra de Rusia es diferente, ya que la proximidad geográfica de la Unión Europea y su dependencia energética del gas ruso proyectaban una preferencia por la no confrontación. 

SANCIONES Y MÁS SANCIONES

El uso de sanciones económicas es una práctica ampliamente implementada por la comunidad internacional. Aunque muchos detractores pueden argumentar que las sanciones no son un método de disuasión suficiente efectivo, principalmente porque sus efectos demoran en llegar y porque los principales afectados suele ser la población general del país, esta también demostrado que eventualmente ponen en aprietos a la cúpula de poder dentro de los gobiernos afectados.

Lo que es cierto es que Rusia entró a este conflicto con una amplia experiencia en sanciones económicas, y por eso busco blindar su economía con anticipación. En razón de esto, la cabeza de VTB, uno de los principales bancos rusos, anuncio hace poco que ante el posible (y ahora real) escenario de ser excluidos de la plataforma SWIFT Rusia podría hacer uso de otros métodos de comunicación más convencionales para lograr mover su información financiera, como correos electrónicos y otros métodos menos convencionales, como el uso de criptomonedas; adicionalmente buscará rutas de pago con países que permitan bordear estas sanciones. En otras palabras, se propondrían reducir un golpe aniquilador a la economía rusa a un incremento (considerable) de los costes operacionales.

Pero además de esto, existen otros factores que podrían diluir el impacto de esta sanción. 

LA VERSIÓN CHINA

En 2016 bancos miembros de SWIFT originarios de Bangladesh, Vietnam, Ecuador y Polonia sufrieron un ataque a su información financiera por parte de Lazarus Group, un grupo de hackers norcoreanos responsables de múltiples ataques cibernéticos en los últimos años. Una brecha de seguridad ocasionada por un malware provocó una multimillonaria perdida para estos bancos.

Este incidente fue un claro recordatorio que no existe un sistema de seguridad perfecto.

En noción de esto, se han ido popularizando mecanismos paralelos a SWIFT, entre los que destacan los de EEUU. y la Unión Europea, por ejemplo. Pero el que más ha ganado popularidad en los últimos años es el producto chino, hablamos de Cross-Border Interbank Payment System, o comúnmente llamado CIPS.

CIPS es un esfuerzo adicional de China para lograr la popularización de las transacciones financieras en yuanes a fin de lograr una relativa independencia del dólar estadounidense. Ante las actuales sanciones para Rusia, es posible que se pronuncie el crecimiento de esta plataforma debido a la migración de operaciones financieras rusas a este sustituto.

RUSIA DESPUÉS DE LA SANCIÓN SWIFT

Una exclusión del sistema SWIFT, por sí misma, no es un estoque letal a las arcas rusas, pero es este golpe sumado al tsunami de sanciones impuestos por la comunidad internacional los que finalmente están logrando mellar en la salud económica de Rusia. A pesar de que recién estamos a puertas de ver el efecto total de estas medidas, es evidente que, de mantenerse, estas podrían atrofiar severamente al país y relega

Es evidente, que esta sanción conlleva un claro anuncio político de parte de las potencias occidentales: “Esta vez será diferente”. La Rusia de Putin ha tenido escenarios similares más recientemente en Crimea y no tan recientemente en Georgia; y a diferencia de estos episodios, la respuesta internacional nunca fue tan determinante ni tan unificada. 

Por estas razones, el panorama en Rusia anuncia una complicada recuperación. En el que tendrá que aceptar una mayor dependencia de China y al mismo tiempo invertir energías en salvar su matrimonio económico con la Unión Europea.